Regina Mier y Terán
Published by Adriana Cantoral,
El naturalismo pictórico de Regina Mier y Terán comprende desde pequeños insectos, animales marinos, grandes aves hasta fauna y flora diversa interactuando con referentes de la ideología pop. Para esta última serie, la cultura sneaker la inspiró notoriamente, pues combina los populares tenis de estilo deportivo, versátiles y atemporales, con simpáticos personajes como pájaros, reptiles, flores y plantas. La conjunción de ambos elementos da como resultado lúdicas composiciones al mero estilo neo pop. En ellas, es evidente que lo creado naturalmente se reconcilia con lo diseñado por el hombre. Se trata de un encuentro entre lo vivo y lo industrializado, es decir, entre lo que existe de manera efímera y sublime en relación con lo manufacturado y mundano. Si bien, son dos realidades diferentes, se complementan de una forma armónica.
Por otro lado, sus elegantes cacatúas, carismáticas y alegres, le imprimen un sello distintivo a su obra figurativa, ya que acentúa sus copetes, plumajes, picos, posturas y las atavía de simbolismos, frases y exuberantes escenarios. Llama la atención que sus trazos son vivaces, al mismo tiempo que su paleta es cálida y animada. Por lo tanto, la creadora es una observadora sensible del medio ambiente, al igual que una fiel retratista de la naturaleza. De ese modo, plasma el alma de los animales y el espíritu del océano en sus ingeniosas ilustraciones.
De tal suerte, sus fascinantes escarabajos nos deleitan con sus ricas gamas cromáticas, complementadas con abundantes coloridos metálicos, brillantes y dorados, así como nos embelesan con sus estilizadas anatomías influidas por las formas del mundo vegetal. Cabe destacar la delicadeza con la que traza sus extremidades y cuerpos, logrando conectarnos con la mágica belleza de su diminuto ser. Lo mismo con las plantas, pues detalla las múltiples tonalidades verdes, amarillas y cafés que las conforman, a la vez que describe sus siluetas y contornos con un profundo sentido estético. Sin duda, ella es una artista que se esmera en las líneas precisas, en el dibujo realista, y se apasiona a la hora de diluir y mezclar el pigmento en distintas capas o bien aplicarlo sobre impresiones gráficas.
Por otra parte, sus creaturas oceánicas, tales como corales y caracoles, parecen pintadas con el brillo del mar, puesto que sus coloridos gozan de un carácter orgánico y sumamente vital. Asimismo, sus peces y crustáceos parecen volver a la vida con sus encendidos tonos y agradables contrastes. Respecto de sus embarcaciones costeras, las dota de una sabia personalidad. En definitiva, Regina nos invita a su imaginario natural en el que los colores transpiran, revolotean y juegan de un lado a otro.
Adriana Cantoral






